La luz de Candela de Mónica Carrillo es un libro que está bien… Bien, en el sentido de ni frío ni calor; en el sentido de que, si no lo lees, no te pierdes nada y, si lo lees, tampoco pierdes tu tiempo. En definitiva, potable.
En líneas generales podríamos decir que es un libro que nos sumerge en la historia de un amor: el comienzo, el auge, las dudas, la ruptura y el posterior olvido. Se trata de un amor enfermizo, tóxico; que atrapa, engancha y del que es bastante complicado escapar. Una relación negativa y obsesiva que más de uno hemos vivido. Por lo que, hasta ahí, todo muy bien.