Últimamente, siempre que pasaba por mi mesa de superventas, me encontraba con la inquietante portada de Tú te vas, tú te quedas de M. J. Arlidge, ¡y os juro que me miraba fijamente desde detrás de sus letras rojas y brillantes! Me informé. Vi que se trataba de novela negra, lo que no me convenció demasiado. Luego averigüé que era un auténtico bestseller en el Reino Unido, lo que lo mejoró, aunque no del todo.