Hace un momento, leía la reseña que hice por entonces de los dos primeros libros de la Trilogía La selección de Kiera Cass: La selección y La élite. Los ponía por las nubles, a pesar de que siempre argumentaba que eran libros facilones y que debían observarse desde ese punto de vista. La Elegida, qué queréis que os diga, me ha parecido, en algunos momentos, muy muy facilón… hasta el punto de preguntarme: ¿Por qué leo estas cosas con la edad que tengo?